Desde hace varios años las revisiones de la Auditoria Superior de la Federación arrojaron irregularidades por miles de millones de pesos en varios estados, entre ellos el de Veracruz. Sin embargo, el Congreso y la Procuraduría General de la República no hicieron nada. El Poder Ejecutivo federal priista y el Congreso, dominado por el PRI, les otorgaron impunidad absoluta a los gobers priistas sobre los cuales había presunciones de la ASF de desvíos millonarios y en Estados Unidos de lavado de dinero y de vínculos con el crimen organizado.
La impunidad se debió a que el regreso a la presidencia del PRI en 2012 y el control del Congreso en 2015, fue posible gracias a bolsas de miles de millones que juntaron los gobernadores para financiar ilegalmente las campañas del PRI. El presidente y los legisladores priistas les deben su triunfo en gran parte a exgobers corruptos del PRI.
No todos los recursos para el PRI salieron directamente de las arcas de los estados. Muchos de los ‘donativos’ fueron de proveedores de los gobiernos estatales, los que se cobraron mediante sobreprecios a los productos y servicios que vendían al gobierno. En algunos estados hasta el crimen organizado le entró a la ‘bolsa’ para ayudar a las campañas del PRI a cambio de que los dejaran ‘trabajar’.
Para arrestar al exgobernador de Veracruz, el Ejecutivo no movió un dedo hasta que perdieron las elecciones y entró un gober del PAN. En Tamaulipas, Estados Unidos (EU) fundamentó acusaciones de los vínculos de un exgober priista con el narcotráfico; por ello lo detuvieron en Italia. En el caso del exgobernador de Coahuila, que fue uno de los que más aportó al PRI, hasta la fecha goza de impunidad, aunque hay acusaciones de que falsificó documentos de su deuda, y en EU de lavado y de vínculos con el narco. (Más datos en libro EPN: El retroceso)
Los gobers priistas saquearon varios de sus estados pues sabían que el presidente y la mayoría de legisladores priistas les debían su puesto. Esas son las principales causas de la inacción de la presidencia, de los diputados y senadores priistas contra la corrupción de sus gobers.