Uno de los “notables constituyentes” de la seudo Constitución de la CDMX, Porfirio Muñoz Ledo, dijo que será de izquierda. Pensó en la ciudad de México como un nuevo país. Sólo falta que proponga declarar su independencia.
¿Qué de nuevo constituye esa ‘Constitución’? ¿Un país, una ciudad nueva? ¿Es un anhelo de los habitantes de la ciudad de México? O al no poder darle lo que verdaderamente anhelan: seguridad, mejor vialidad, menos contaminación, menos multas, menores prediales y menos corrupción, les ofrecen una ‘Constitución’, que es una ley más, que no le aporta ningún beneficio concreto a 99 por ciento de la ciudadanía, al igual que el cambio de nombre.
Para plasmar el derecho a la felicidad, contraproducentes altos salarios mínimos o reiterar los derechos humanos, sobre legislados, no es necesario crear un costoso show mediático de una Constitución y un Constituyente que no constituye nada nuevo.
La susodicha Constitución no puede adicionar ningún ordenamiento que contravenga a la Constitución federal y lo que puede se podría incluir en una ley o reglamento. Con el antecedente de una constitución para la CDMX, cualquier otra ciudad de la república podría reclamar su Constitución, y engendrar un Constituyente.
Cuántos millones tomarán de los impuestos para legislar sobre una ‘Constitución’ que es en realidad una nueva ley orgánica, que podría crear la Asamblea Legislativa de la CDMX o el Congreso federal.
El show de una Constitución para la ciudad de México es un proyecto político para aglutinar a las tribus y personajes de la izquierda a la sombra de un precandidato del PRD a la presidencia, esa es su finalidad real.
Desde el punto de vista jurídico y social sólo provocará conflicto de leyes, más burocracia, más dependencias, más permisos y más corrupción.
Pero algunos piensan que en lugar de recordar a la actual administración por sus fallas, será recordada como la que dio una Constitución a la CDMX, que en nada mejorará los niveles de vida de los habitantes del otrora Distrito Federal, pero que puede vestir a un candidato del PRD a la presidencia como “el impulsor de la Constitución de la Ciudad de México”